No me interesa conocer
a sus papas, no me interesa que vayamos a comer, ni al cine, ni a caminar por
el parque tomaditos de la mano. La luna y las estrellas déjelas donde están, que
desde acá se ven perfectas. ¿Sabe una cosa? desde acá amarrada a este sofá,
sodomizada de día y de noche, con las marcas de sus dientes en mis pezones... estoy
comenzando a amarlo a usted y a mi mordaza.